jueves, 25 de agosto de 2016

Nightlife - Cal Leandros series, vol. 1



La Urban Fantasy es uno de esos géneros que me gustan y me mueven. Entre los dos o tres géneros que suelo seguir es uno de los habituales aunque reconozco que se está escribiendo mucho en los últimos años y empieza a ser difícil encontrar algo realmente original que aporte cosas nuevas y suponga un estímulo al leerlo. 

Además es un género que no tiende a disponer de obras autoconclusivas. Todas o la mayor parte son parte de una serie, por lo general muy larga, lo que viene a aumentar la dificultad de seguirlas. Si cada año se publica un libro, la serie se vuelve cada vez más compleja con un mayor número de personajes y de subtramas y requieren una atención significativa, cada vez resultará más difícil diversificar con otras obras.

Al menos eso es lo que yo experimento. 

Frente al mundo de las trilogías, que están tan de moda en otras ramas de lo fantástico, en la Urban las series aumentan año tras año el número de volumenes que contienen y se alargan en periodos de tiempo enormes (la Saga de Harry Dresden comenzó en el año 2000 y desde entonces, casi de forma ininterrumpida, ha sumado un volumen cada año hasta el actual, 16 libros en otros tantos años). 

Una nueva serie que haya llamado la atención supone una atención propia que dedicarle si la obra cumple las expectativas (lo que es genial pero también un problema, por coste económico y porque al final es casi imposible dividir la atención por cuestiones de tiempo yde dinero).

Por eso hace un par de meses, con todo eso en mente, me plantee reiniciar alguna serie (la de Dresden) para poder poner algo de orden en el caos que actualmente tengo con ella (de ahí las dos pequeñas reseñas del post anterior) y limitar a tres o cuatro las series sinfin en un intento de ser coherente y al menos tocarlas un par de veces al año hasta ponerme al día sin haberme perdido algún posible detalle porque está claro que en muchas de ellas el tratamiento como obras autoconclusivas no funciona. 

De esa forma Harry Dresden, Mercedes Thompson, Kate Andrews,  Alex Verus y Atticus O´Sullivan, serán los personajes de Urban que pasenpor aquí de ahora en adelante. Acompañados, a última hora, de Cal Leandros y su hermano Nick, que parecen haber llegado para quedarse.

La serie de los hermanos Leandros aparece porque al quinteto anterior quería añadirle una serie más. Pudo haber sido la de "October Daye", que también estaba en la mesilla, pero por la sinopsis y lo poco que pude averiguar sin reventarme nada, me pareció que tanto "Nightlife" (y el resto que van conformando la serie) pueden aportar algo distinto a mis lecturas.

Tras su lectura creo que ha sido un acierto. Un gran acierto de hecho. Espero que se mantenga.

El porqué no debería ser muy difícil de explicar... creo.

Hay dos protagonistas, noo uno sólo, lo que permite de alguna forma descargar un poco la trama, crear diálogos más o menos frecuentes (sean verbales o gestuales), agilizando la lectura y evitando tanta introspección, por mucho que de eso también haya por aquí.

Además los dos hermanos son bastante legos en estos asuntos, lo que permite que por mucho que nos lleven algo de ventaja no es tanta como para sentir que vamos a una exhibición en un museo para que alguien nos haga la visita guiada.

Salvo las tres o cuatro pequeñas cosas que ellos saben al principio de la novela, el resto es tan nuevo para ellos como para nosotros y el lector descubre las cosas a la vez que ellos, de la mano de ese personaje tan entrañable que es Robin Goodfellow.

Ambos son prácticamente humanos (salvo algún pequeño (o gran) matiz en el caso de Cal) al menos en comportamiento, lo que evita que estemos pendientes de distintas reglas de juego, magias y poderes insospechados y la novela se ciña más a la acción más básica que existe, el combate directo, bien sea con espadas, pistolas o cualquier otro dispositivo dañino comercializable en tiendas del siglo XXI.

Los personajes son tridimensionales, reales y bien construidos, sin mucha exageración ni parafernalia. Son duros pero es producto de los acontecimientos y viven en un mundo que podemos entender perfectamente porque no deja de ser el nuestro y sus problemas, aunque parcialmente, también lo son.

Las criaturas sorprenden porque no cumplen necesariamente con lo que se espera de ellas o, al menos, no todas son como siempre has leído, lo que capta tu atención cuando los lees y además te permite realizar un sano ejercicio de reseteo y a la vez ay algo cautivador en cuanto rodea a la trama y a sus personajes. Es de esas lecturas que te deja dos o tres momentos (el Darkling, el momento Troll, alguna escena en el bar, el momento hombre lobo en hotel...) para el recuerdo, que no es algo que siempre se pueda afirmar de lo que se lee.

La trama está bien construida y es original sin cometer un error que  parece cada vez más habitual como es confundir "sorprendente" con "ultracomplejo" y "complejo" con "caótico tirando a continua sucesión de historias y avatares mil que convierten toda la trama en una matrioska que nunca sabes dónde va a acabar". Aquí te sientas, lees, te sumerges y sigues la narración sin necesidad de volverte loco haciendo apuntes mentales (o físicos) de cuanto pasa.

El final no es una megabatalla de dimensiones próximas al armaggeddon, donde el prota se enfrenta a una criatura casi divina, capaz de destruir el mundo con un sólo gesto del dedo. Esos momentos "Bola de Dragón",  con el constante momento "uyyy, que lo ha matado por enésima vez", no aparecen.

La forma de escribir es ágil y la narración a través de los ojos de Caliban es interesante, sobre todo cuando aparece el Darkling en escena y todo cambia. Es algo sorprendente y da a la novela un toque distinto que marca la diferencia con el resto de obras.

No, no es una novela redonda..

Dependiendo de los gustos siempre hay algo que mejorar: no estaría mal algo más de detalle en las luchas, un poco menos de Cal y un poco más de Nick o quizá esa sensación de deja vú que pueda tener algún seguidor de Supernatural que establezca algún paralelismo maligno/sospechoso.

Pero en general está bien, bastante bien de hecho, sumando bastante más de lo esperando y evitando dejar indiferente. 

Sorprende, agrada y se sale un poco de la tónica general del género o al menos de la forma en que lo suelen tratar otros autores con demasiado paralelismos entre sus novelas. Ésta aporta un poco de novedad, una lectura ágil y entretenimiento adictivo junto a alguna sorpresa.

Valoración: Me gusta mucho

martes, 23 de agosto de 2016

"Crímenes" de Ferdinand Von Schirach y dos historias breves de Harry Dresden



Ferdinand Von Schirach es un abogado penalista que se inspiró en casos que había visto en el ejercicio de su profesión, no por pura morbosidad o, como pasa en ocasiones, para hacer reir a la gente con algunas de las cosas cómicas que a todos nos suceden en nuestras profesiones sino para hablar del ser humano, de las vidas que hay detrás de algunas de las personas que son llamados "criminales" pero que no siempre pueden ser culpabilizadas.

Sus relatos nos acercan a la naturaleza humana en toda su amplitud, hablando de las miserias de algunos y de la jeta de otros, de cómo la suerte influye en ocasiones para bien y para mal en nuestras vidas y cómo hay muchas veces en que el sistema falla a las personas y no ellas las que fallan a la sociedad.

El estilo es directo, conciso y práctico, sitúa rápido en la trama y tiende a provocar reflexiones en quién lo lee.

A continuación un pequeño avance sobre los temas a tratar:  

Fähner:
Una increíble recreación de una historia de un hombre maltratado por su mujer en apenas 3-4 hojas. 

Una historia que reflexiona sobre la culpa (desde el punto de vista legal y desde el punto de vista social) y sobre la pérdida de valores en las sociedades actuales a través de la la figura del juramento.

Interesante, ligera y honesta.

El cuenco de té de Tanata
Una historia de violencia y sobre la violencia... o más bien sobre las pirámides alimenticias que existen en todos los órdenes de la vida, no sólo en el mundo animal y del peligro de no conocer cuál es nuestro lugar en el mundo y los riesgos del dinero fácil. 

Un relato distinto y con una narración muy Tarantiniana que demuestra que no hay nada peor en esta vida que no saber cuáles son las reglas del juego y las consecuencias de no saber con quién se juega.

Con un apéndice bastante curioso

El veredicto
Una narración muy bien orquesetada donde Von Schirach nos hace partícipes del dolor y sufrimiento que acompaña a lo largo de su vida a dos hermanos, la forma en que luchan contra todas las distintas adversidades y el momento en que uno se ve obligado a tomar una drástica decisión.

Dura porque es difícil no lamentar la suerte de los dos protagonistas y, porque cueste o no, al final el lector se posiciona sobre el tema en cuestión y es difícil hacerlo manteniento la distancia y la frialdad con que uno habla de ciertos temas cuando simplemente lo hace en abstracto o por un titular de un periódico.

El erizo
Narración sobre los prejuicios de todo tipo que existen en la sociedad y de cómo en muchas ocasiones es la propia sociedad y la justicia la que condicionada por los mismos maniata y condena  a una vida determinada a un ciudadano. 

Curiosa, divertida y muy amena. La justicia jugando al gato y al ratón con unos  hermanos, hasta que uno decide que él lo que es es un "erizo"
Suerte
Lo más difícil a veces es simplificar una historia con un resumen. Máxime cuando de lo que se habla es de la "suerte" de su presencia o no y del significado que tiene.
Podría hablar aquí de equivocaciones, de malos entendidos, de lo injusta que es la vida, de lo que se hace por amor y hasta donde se puede llegar por él, incluso de la terminología en el derecho y de cómo tanto o más que las acciones lo que se castiga es la intencionalidad, pues de todo ello se trata en el relato pero me voy a quedar con una sola cosa, perspectiva y sentimiento optimista, para mí de eso habla el relato, de cómo lo importante es quedarte al final con lo bueno, buscarlo a toda costa y aferrarte a ello y hacer lo posible para que esa forma de entender la vida se convierta en algo habitual.

Summertime
Nos sumergimos en un proceso penal por asesinato y lo vivimos desde el primer plano de dos extremos no tan distantes, el del fiscal y el del defensor, olvidando por un instante que ambos son subjetivos en sus actuaciones y lo hacen movidos por sus propios intereses, incoscientes, quizá, de que otros pueden haber anticipado sus movimientos. 

Legítima defensa
O como en ocasiones hacer bien tu trabajo no te reporta la satisfacción personal que debería ser recomendable y la aceptación de una dura realidad como es que jueces, fiscales y abogados son también humanos y en ocasiones, sin querer, son las víctimas quienes realmente son juzgadas y no los acusados.

Verde
La denuncia a una sociedad que tiende a juzgar antes de lo recomendable basándose en prejuicios de cualquier tipo hasta el punto de adoptar medidas muy peligrosas y una queja ante la situación de muchas personas enfermas que precisamente por el miedo al qué dirán, a la repercusión de que se conozca su caso o, simplemente, a que los miedos y prejuicios se extiendan hacia el entorno, acaban viendo como sus actos son silenciados (en ocasiones aumentando el riesgo para terceros).

La espina
A veces un simple golpe de mala suerte puede dar al traste con nuestra vida, aunque un poco de negligencia o de dejadez por parte de algún tercero tampoco perjudica.

La soledad y el confinamiento en espacios limitados, sin estímulos ni interacción con otros puede ser el comienzo de una enfermedad de resultados imprevisibles.

Amor
Lo fácil, lo morboso o lo que me pide el cuerpo es hablar de canibalismo y de cuanto mueve, pero me gustaría creer que dentro de unas semanas cuando recuerde este relato en lo que pensaré es en la falta de rigurosidad de cada uno de nosotros cuando se nos reconviene y se nos intenta ayudar y de las consecuencias que una relación afectiva (familiar, amistosa, amorosa, etc...) mal entendida pueden llegar a acarrear para terceros.

El etíope
Castigar, prevenir y reinsertar. Las tres funciones de la pena. Eso es lo que  dice el Derecho o lo que yo estudie.

Cierto que no debería quedar ningún crimen sin castigo y que la sociedad y las víctimas requieren algún tipo de satisfacción por los hechos acontecidos pero ¿hasta qué punto cuando ha pasado el tiempo y el autor de los hechos ha abandonado por completo esa vida y ha rehecho la suya junto a otros a los que, además,  ha ayudado a prosperar debe apartársele de todo para reprenderle por hechos que hizo cuando era otra persona?

Valoración: me gusta mucho
 



Termino con la reseña de un relato muy breve y de un comic, ambos con relación con los libros, precuelas en los dos casos de "Storm Front", la primera novela de la serie protagonizada por Harry Dresden.

"Restoration of Faith" es un relato breve donde podemos tomar contacto por primera vez con lo que para mí es la más pura esencia de Harry, lo que le hace ser como es y que sea un personaje único.

Juego de palabras que se refiere tanto a la búsqueda de una niña llamada Faith que ha desaparecido del hogar paterno y la falta de ilusión y de esperanza de la joven con respecto a la vida, todo resuelto  en apenas 12 páginas.

Primera toma de contacto con el universo Dresden, el momento en que Karrin Murphy (que aún no es detective) y él se conocen y la primera sorpresa de la factoría de la mano de Gogoth el Troll.

"Welcome to the jungle" cuatro entregas de unas 35 páginas cada una, ilustradas por Ardian Syaf, que muestran el segundo componente que caracteriza las novelas, acción y riego, luchas desproporcionadas y malos muy crueles.

Visualmente agradable, con mucho del espíritu de las novelas, pero muy visual, muy ágil. Mi versión de Harry es algo distinta a la de las ilustraciones que aquí aparecen pero...

viernes, 19 de agosto de 2016

La niebla y la doncella - Serie de Bevilacqua y Chamorro, vol. 3



Difícil no comenzar como siempre que aparece una novela de Lorenzo Silva por aquí. No alabar su obra, no destacar lo mucho que me gusta su personaje, etc..., más aún cuando de todas las novelas suyas que he leído hasta la fecha (y creo que de la serie de Bevilacqua y Chamorro ya van seis) ésta es, con diferencia, la que más me gusta.

Tiene el sabor de la vida misma, ese aire ligeramente triste de quién sabe que de alguna forma todo va dirigido a un final pesaroso (si no malo), que inevitable va a dejar marca. Se deduce de una de las primeras afirmaciones de Ruben Bevilacqua y desde ese momento esa sensación se apodera de nosotros y nos acompaña durante toda la narración hasta que se produce el desenlace.

Una sensación que en novela sólo recuerdo que me hayan transmitido en dos momentos puntuales: cuando de crío me dio por leer las historias de la mitología griega donde el destino está siempre muy presente y el oráculo marcaba el destino de algún protagonista hacia un final desastroso ya desde el principio y en la novela "La mirada de las furias", de Javier Negrete, también con reminiscencias mitológicas, donde la misma predestinación aparecía en mitad de la narración para marcar la evolución de su protagonista y señalar su inexorable final.

La tristeza es la nota predominante en la novela, no sólo por el camino que van a seguir los protagonistas, también por varios de los contenidos de la trama. De la mano de la singular prosa de Lorenzo Silva recorremos la actualidad nacional (corrupción política y empresarial, sistema legal no siempre adecuado a la realidad social, corrupción en las instituciones, desencanto social y problemas de inmigración) como si lo que narrase el autor fuese algo que acontece en la España de hoy, y no en la de hace catorce años, que fue cuando lo escribió.

Y es que si algo tienen las novelas de Bevilacqua y Chamorro es que son atemporales. Puede que dentro de unos años las referencias geográficas de sus novelas no tengan equivalencia en la realidad pero salvo por eso sus obras tienen algo anacrónico, algo intemporal, que les permite tener vigencia las leas cuando las leas.

Los nombres de la actualidad social pueden cambiar, los grupos políticos alternarse, los titulares sucederse unos a otros pero el espíritu de nuestra sociedad, una cultura marcadamente mediterránea con ese toque propio made in Spain (del que quizás no deberíamos estar tan orgullosos) permanece y Lorenzo Silva es uno de los escritores con mayor capacidad para saber plasmarlo en sus novelas, convirtiendo cada una de ellas en un espejo en el que nos reflejamos tanto nuestra sociedad como nosotros y en el que al mirarnos deberíamos avergonzarnos (en muchos casos) de qué somos, cómo hemos llegado a esto y lo más triste de todo, hacia donde vamos de forma inexorable porque aún siendo conscientes de todo hemos decidido que no nos vamos a apear.

Sus personajes envejecen, se transforman y cambian, mutan pero siempre identificables, manteniendo sus señas de identidad, alterados tan sólo por los ajustes que ocasiona el paso del tiempo y el proceso de maduración, siendo víctimas de eso que los de carne y hueso llamamos "el paso de los años" y que algún escritor (como he criticado en algún momento a Donna Leon) no siempre saben hacer con sus personajes.

Lo vivido nos cambia y las experiencias (narradas o no) de Bevilacqua y Chamorro los acercan a nosotros, silenciosos espectadores de sus vivencias, humanizándolos ante nuestros ojos y convirtiéndoles en personajes de nuestras vidas, referencias lejanas a las que siempre volvemos, con las que siempre conseguimos reengancharnos... porque son de nuestra edad o porque pasan por situaciones que nosotros hemos vivido o experimentado o, simple y llanamente, porque su creador es capaz de meternos en su piel y consigue que experimentemos el proceso que les lleva a ser y comportarse como lo hace.

Son figuras humanas, con sentimientos e inseguridades, con vulnerabilidades, pero siempre creibles, muy reales. Sus dudas y complejos, los miedos, deseos y disputas internas son las de cualquiera de nosotros y lo siguen siendo a lo largo de los años, quizás por eso uno pueda disfrutar con esta novela igual ahora, camino de los 40 (el mismo camino que lleva Bevilacqua en esta novela) que hace 10 años, cuando camino de los 30 lo leías y eras capaz de identificarte con lo que sabías que bien podía ser tu situación futura.

"La niebla y la doncella" fue la novela que definitivamente me enganchó a la serie, tras haber leído en primer lugar "El alquimista impaciente" sin que en aquel momento consiguiese engancharme del todo. No soy dado a leer sobre novelas ambientadas en España, con situaciones de aquí y personajes llenos de arquetipos de un tipo u otro y sin embargo tras su primera lectura sentí el gusto por sus personajes, me identifiqué con sus protagonistas y desde entonces no fuí capaz de separarme de ellos. 

Conseguí y leí "El lejano país de los estanques" la primera y también significativa novela de la serie y desde entonces forma parte de mi vida cotidiana, por lo que tras haber leído las primeras seis novelas y aprovechando la pausa que hubo tras "La estrategia del agua", decidí reinicar la serie para actualizar los recuerdos y disfrutar de nuevo con su lectura.

Es "La niebla y la doncella" la novela que más me gusta y que me sigue marcando. La que me toca. La que es capaz de cambiar mi estado de ánimo. La que no consigo olvidar pase lo que pase. La que hace que no se me quite de la cabeza la necesidad de visitar Canarias en cuanto disponga de la más mínima oportunidad y más especialmente La Gomera, porque quiero conocer sus bosques de laurisilva, la niebla y ese cambio tan brusco de desierto a bosque denso que se produce al salir de un tunel.

Y es la novela de Andrada...el eje de toda la trama. La que marca la novela y al lector. Ese personaje secundario al que no olvidas pase el tiempo que pase, porque por encima de todo "la niebla y la doncella" es su novela, la que marca a Ruben como quizás ningún otro personaje lo haya hecho hasta la fecha, la que como lector admiras, deseas y te estremece, la que tiene una rivalidad con Chamorro que te cautiva, la que sobrevuela todas las páginas de la trama hasta cuando no está presente, posiblemente una de las mejores construcciones de su creador siempre con la excepción de los propios protagonistas, sublimes en su humanidad/fragilidad/vulnerabilidad durante toda la novela. Sólo Ruben y Alicia pueden decirse tanto en silencio y además ser capaces de hacernos partícipes de esa intimidad compartida a nosotros como lectores.

Valoración: Increíble

Soy devoto de la serie pero de las cinco primeras ésta es mi novela favorita, con algo (no mucho) de distancia sobre "El lejano país de los estanques", hasta el punto que tras haberla leído hace apenas tres meses no me ha supuesto un problema releerla a marchas forzadas en un par de tardes para poder escribir este post.

martes, 16 de agosto de 2016

Uno por dinero - (Stephanie Plum´s series, Vol. 1)




A parte del evidente peligro de acabar olvidando parte del contenido y las sensaciones que la lectura te ha producido y, por tanto, poder encontrarte sin saber qué escribir porque no te acuerdas de nada, el diferir el comentario de una novela puede convertirse en un ejercicio muy injusto y bastante ingrato ante el riesgo (en verano muy real) de que el número de obras leídas entre medias aumente y se produzcan alteraciones sobre tu percepción de la obra, y no siempre para mejor.

Hago esta aclaración porque desde que leí esta novela creo que hace un par de semanas, han pasado por mis manos tres o cuatro más, entre las que se encuentran "La niebla y la doncella" y "La isla de los cazadores de pájaros", que me han encantado y que tratándose de novela negra (aunque de corte más social) el agravio comparativo podría ser mayúsculo.

Por eso voy a intentar hacer un ejercicio de abstracción y olvidarme de esas dos lecturas o mejor, voy a intentar poner todas ellas en perspectiva y hablar de "Uno por dinero" con la mayor objetividad posible.

No recuerdo que haya pasado por aquí pero no es la primera vez que leo esta novela. Y, si no recuerdo mal, leí también la segunda. 

¿Es tan buena como para releerla? No, sinceramente no y lo sabía antes de empezar, pero temía haber olvidado la mayor parte de los detalles y no quería retomar la serie donde la había dejado sin estar 100% en ella. No me parecía justo.

Buscaba una novela menor. Una elección con conocimiento de causa. Un repositorio de novelas para sanear la cabeza, triviales, ligeras pero entretenidas, que poder intercalar entre otras lecturas más arduas o lecturas en inglés, que siempre me desgastan más y, a ser posible, que fuese lo suficientemente amplia para darme cuartelillo una temporada porque otras novelas similares (como "Spellman y asociados", que pasó por aquí hace bien poco) aún no han tenido mucha tirada en España y al final te pasas el tiempo reenganchandote y releyendo para seguir con sus tramas.

Vaya por delante que estamos ante ese género que apareció aquí hace poco como cozy mistery, que mi experiencia dice que está bien para pasar el rato y que no expone al lector a muchos riesgos ni exigencias.

Es graciosa.... al menos tiene un puntito, no muy grande, no hilarante tampoco, pero sí lo justo para arrancar una ligera sonrisa en algún momento.

Su protagonista es ingenua, peleona y tiene la suerte de no ser irritante. Es una pardilla pero no es ingenua y aprende rápido. Las situaciones que se producen son entendibles y hasta te identificas con alguna de ellas y tiene ese punto ligero que trivializa la trama y la hace amena.

Difiere quizás de otras novelas similares en que sí tiene un punto más violento en su trama, un componente más duro que ensombrece parte de las chanzas. No se ve pero sí se intuye y en algún momento y dependiendo de la edad de quién lo lee o de su bagaje y gusto literario, puede ser de esas que te ponen un poquito en tensión, lo justo para vivir la trama con un poco más de interés sin que en ningún momento sea dura o escabrosa. 

Eso le pone ese puntito extra, ese algo que hace que te acuerdas de ella antes que de otras y que seas mas propenso a recomendarla cuando alguien se quiere iniciar o que busca algo menos naive dentro de que sea una lectura light.

Su protagonista es agradable. Leíble y, hasta cierto punto, empatizable. Tiene un punto masoca, un punto inconsciente y mucho por aprender, pero está lejos de ser ñoña y vive en el mismo mundo que todos nosotros así que es real, aunque no sea memorable.

Tiene química y tensión sexual con su antagonista  (eso suma, le da otro punto distinto a la trama), también un punto de mala leche, algo de rebeldía y mucha rabia ante la vida y lo que le depara, lo  que hace que caiga simpática aunque sus diálogos no sean siempre primorosos. Eso sí, cuenta con una abuela (la abuela Mazur) que es para enmarcar, capaz de amenizar las cenas familiares cuando tocan y de comerse a todos los demás personajes.

Poco más puedo decir, es una buena novela introductoria, que va de menos a más, que cuando gana en tensión pierde en humor pero que quizás encuentre en ese equilibrio parte de su encanto, a lo que se suma la ambientación en ese cautivador (por desconocido por estos lares) mundo de los cazarecompensas y los recuperadores de fianzas, un cambio que también se agradece.

Valoración: está bien. 

P.D: la portada del libro con el look Pippy Calzaslargas no ayuda a tomarse muy en serio el libro pero lo cierto es que tras esta primera entrega ofrece la posibilidad de que sea capaz de instalarse en esa zona intermedia entre lo ligero y lo profundo que puede convertirla en una rara avis a tener en cuenta


Ocio... y otras divagaciones:

Con los Juegos de fondo casi imposible dar con un hueco para el cine pero para quién quiera imágenes que se quedan en la retina y hacen recapacitar sobre ... el vídeo de X Ambassadors para su canción "Renegades".
Un descubrimiento, "Algo que sirva como luz" de Supersubmarina.

Un sonido... el de Criss Cab con Pharrell Williams en "Liar liar".

martes, 9 de agosto de 2016

Jazz para el asesino del hacha



A veces uno no elige los libros, son ellos los que te eligen a ti. 

"Jazz para el asesino del hacha" llegó a mí sin querer, cuando estaba buscando algo más que añadir a mis listas de libros pendientes. 

Lo hizo sin ruido, en una búsqueda errática aprovechando la multitud de propuestas que aparecen en internet cada vez que se acerca un periodo festivo, en este caso el verano.

Un verano marcado por el retorno de Jöel Dicker, por el fenómeno "La viuda" (que como "La chica del tren" el verano pasado, lo está devorando todo pero aún no me ha llegado su momento) y el nuevo libro de Lorenzo Silva, pero en donde no he vuelto a ver información sobre esta novela en ningún otro momento si no ha sido buscando directamente por el título de la novela y aún con esas no es sencillo.

Es una pena porque es una buena novela. Le falta quizás algo de pegada para ser algo más que eso y  quizás, sólo quizás, unos personajes que permitan al lector un acercamiento más empático, demasiado fríos, demasiado distantes y poco accesibles para mi gusto, pero por lo demás es una buena novela, y muy interesante.

Me gusta...

... que teniendo un fundamento histórico (unos homicidios acaecidos en 1919 en Nueva Orleans) no lo use como reclamo publicitario, ni alegue que va a explicar lo que sucedió entonces (cuando ha transcurrido un siglo) ni que haga del morbo su reclamo. 

    Es una novela sobria que, teniendo en cuenta lo que pasó entonces, construye una historia que puede ser (o no) la real pero que está muy bien urdida, muestra el entorno y las circunstancias que rodearon los sucesos y da una posible explicación (o más de una) a lo que aconteció.
 
... que la gran protagonista, por encima de cualquier personaje de la misma, es Nueva Orleans, con el encanto, la magia, el misterio, la variedad étnica, la diversidad de culturas y la música que uno siempre atribuye a una de las ciudades del mundo con más encanto.

... la ambientación. Ese tono gris que se mete en la lectura desde el comienzo y que hace que desde entonces y hasta el final todo esté impregnado de ese áura pesarosa y triste. Luego llega la lluvia y lo deja todo a punto.

   Quizás por eso no he sido capaz de imaginar la narración en color, y la he vivido desde el primer momento (en un fenómeno que no recuerdo que me haya sucedido antes) en un tono blanco y negro de película clásica.

... que hay tres personajes, con tres historias distintas y tres formas de investigar y de llegar a resultados (¿totalmente?) distintos y que sin embargo se sostienen las unas frente (junto a) las otras, creando un todo bastante interesante, un entramado complejo pero creíble, que sirve para hablar y explicar las entrañas de lo que sucedía en la ciudad en aquél momento. 

... que habla sin tapujos de muchos temas (la situación social en la ciudad, los problemas raciales, la presencia de la mafia, la corrupción en el estamento policial, los ghettos y el reparto de barrios, la pobreza, los problemas que ya entonces había con la ciudad cuando se daban según que condiciones climatológicas...) pero sin entrar en el morbo, sin convertir todo en una novela sensacionalista y con la ligereza que busca el lector que intenta aprender y saciar su curiosidad sobre un sitio o un momento, sin entrar en una retahila de circunstancias y complejidades que conviertan lo que en principio debe ser un entretenimiento en una disertación fría y adusta sobre el tema.


Le falla...

... que falta algo de sentimiento en general. 

    La descripción de la ciudad y del ambiente está muy bien construida. Todos los temas los toca lo justo y con interés. La propia historia es cautivadora de por sí pero la terminas con la sensación de haber leído una buena novela social pero no una obra con personajes. 

    Lo he puesto arriba, los tres protagonistas: Michael Talbott (policía), Ida Davis (secretaria de una agencia de detectives) y el expresidiario Luca de D´Andrea (quizás éste más cercano), no llegan a generar una respuesta emocional, sólo distancia. 

    Sin sentimiento no hay preocupación por lo que pueda pasar a los personajes, sólo lectura aséptica y así se pierde la tensión y, por definición, el clímax. Y no es que no lo haya, simplemente es que no lo experimentas como deberías, quedándose en su mínima expresión. 

Valoración: me gusta

Es una buena lectura, entretenida y sobre todo instructiva. 

Mejor libro que muchos otros que han pasado por aquí sin dejar huella pero alejado quizás de las que indudablemente están destinadas a permanecer en el recuerdo.

De todas formas en cuanto se publique la suguiente novela de Ray Celestin, creo que en español será algo así como "El blues del hombre muerto", la leeré, que en ésta ha sido Nueva Orleans pero en la próxima es Chicago en los años 20 y hay cosas que uno no se puede perder.

Otros:
No dejo de tatarear "La bicicleta" de Shakira y Carlos Vives y aún no me explico cómo me atreví a ver "Independence Day: contraataque", así que sugerencias, recomendaciones y gustos varios mejor dejarlos para otro día.


jueves, 4 de agosto de 2016

La bomba número seis y otros relatos



Llego a Paolo Bacigalupi tras muchos años de dar largas a su lectura. 

La primera vez que vi la portada de "La chica mecánica", fue en Londres y confieso que me cautivó. 

Durante varios días al visitar las librerías siempre encontraba el libro en las isletas centrales y no dejé de rondar a su alrededor durante mi estancia allí. Parecía fantasía y tenía un pintón, pero nunca llegué a mirar la sinopsis de la novela.

El tiempo pasó y hace algún tiempo me reencontré con la novela en una búsqueda por amazon. La sensación fue la misma, sólo que esta vez sí leí la reseña y me quedé con la confirmación de mi miedo, un único pensamiento ¿Busco evasión y me voy a sumergir en una novela que se centra en una proyección de lo que puede ser el mundo actual si se dan una serie de circunstancias que, para que engañarnos, cada vez son mas probables?

He rehuído su lectura desde entonces porque no estaba preparado. No tenía ganas de enfrentarme a lo que podía plantear la novela y las cuestiones que iban a subyacer en sus páginas.

Pero cuando vi esta colección de relatos cortos pensé que era una forma de acercarme a la prosa de Bacigalupi y su mensaje de una forma más sesgada, puntual y limitada.

Creo que no ha sido una valoración muy errónea porque tengo la sensación de que en varios de los relatos el mundo que aparece (el nuestro en un futuro no tan improbable), es el mismo que en el de "La chica mecánica", incluso da la sensación de que en uno de ellos aparezca el personaje del título.

Se trata de relatos interesantes, atrayentes pero también desoladores, aunque sólo sea porque es un mundo que cualquier día de estos puede acabar siendo el nuestro. Desde luego los elementos para llegar a él están ahí, puede que se trate de una mera cuestión de tiempo.

Termino su lectura satisfecho, contento de la elección y enamorado de la forma que tiene su autor de narrar y de introducirte en una historia distinta cada vez, pero con un poco de pesar por el mensaje que subyace en muchas de ellas y porque, quizás, en muchos casos ves en la sociedad actual muchas de las semillas necesarias para que ese "futuro literario" acabe por germinar.

Valoración: me gusta mucho.

Vaya por delante que me han gustado más los primeros relatos que los últimos, quizás demasiado reales o, simplemente, con temáticas menos agradecidas.

"La chica mecánica" caerá... pero creo que tardará algún tiempo aún, que me tengo que recuperar.

A continuación, para quién quiera hacerse una idea de lo que creo que se trata en los distintosrelatos, sin que se reviente nada de la trama...






Un bolsillo lleno de dharma

La primera historia y la primera sorpresa. 

Tiene un aire ciberpunk que no está tan presente en el resto de los relatos. El más liviano de todos, el que tiene menos carga personal para el lector y el más dinámico, pequeña dosis de adrenalina incluida.

Edificios biológicos, la dura lucha entre Nepal y China, la reencarnación,  la importancia de la religión no sólo como creencia personal sino como elemento aglutinador de todo un pueblo y una cuestión que subyace pero no se trata en el fondo, como es el hecho de si la personalidad de una persona pueda almacenarse en un soporte informático o, en otras palabras, si el alma se puede almacenar en otros soportes no corpóreos.

La chica aflautada

Una de mis historias favoritas y una de las más duras.

Me fascina el ambiente con que lo ha envuelto y alguno de sus personajes secundarios por su potencial. 

Imposible no mencionar la importancia de lo que trata, la forma en que lo hace y el final que elige el autor, que no es exactamente el que habría cogido yo pero que es igual de válido, aunque creo que entre lo que él elige y el que yo esperaba hay un serio un matiz más pesimista en el suyo.

Sociedad feudal, el mundo de la fama y la industria que se alimenta de la misma, el culto al cuerpo, en una historia donde el fenómeno fan, el poder y la lujuria se entrecruzan con la pérdida de identidad, la existencia dependiente del culto de los demás, las alteraciones biológicas y genéticas. 

Distintas formas de poder. Distintas maneras de representar la esclavitud y la libertad como fin a alcanzar, pero ¿a qué precio?

Seres de arena y escoria

Lo que pasa cuando el ser humano deja de necesitar otros seres para alimentarse, capaz de obtener el sustento de cualquier material y de curar casi cualquier herida y lesión.

Una reflexión sobre lo que nos convierte en humanos y si la dependencia de otras especies es una cuestión meramente alimentación o si es la interacción con otros la que nos ayuda a alcanzar una plenitud total como seres vivos.

No podía leer la novela y no pensar en los Astartes del Warhammer 40.000.

El pasho 

Otra de esas historias que marcan al lector. Una de mis preferidas.

El duelo intelectual y físico entre un abuelo y su nieto.

Dos generaciones, dos formas de entender el mundo, una lucha de dos voluntades inquebrantables.

El reflejo de la lucha entre la tradición y el cambio, el miedo a la pérdida de identidad personal y racial ante un todo común y monocorde. 

Y una honda reflexión sobre el conocimiento y sus múltiples peligros desde el que supone su adquisición y uso sin sin comprender las consecuencias del mismo hasta el que supone su uso como forma de dominación cuando acaba sirviendo para condenar al olvido enseñanzas y creencias pasadas con la consiguiente pérdida de identidad. 

Quizás sean los parajes, quizás el mensaje, quizás los distintos caracteres de los dos protagonistas pero no he podido evitar pensar en Dune y sus secuelas.
El fabricante de calorías

La explicación de como el deseo económico y el afan de enriquecimiento pueden llevar a la humanidad a su desaparición con las grandes empresas dispuestas a provocar un retroceso social y una involución a todos los niveles con tal de conseguir dominar los mercados y los gobiernos de las naciones.

Aquí son empresas dedicadas a la mejora de los cultivos pero se puede extrapolar a casi cualquier otra variante.

Puede que sea el origen del mundo de "La chica mecánica"

El cazador de tamariscos

El agua como motivo de ruptura social en un mundo hiperpoblado con escasez de recursos.

La lucha del individuo contra la maquinaria social, el convencimiento de que todos sabemos más que el sistema y somos capaces de engañarlo, convencidos siempre de que somos más listos que nadie.

Respuesta evolutiva

Una reflexión sobre la vida, sobre lo que hace que valga la pena cuando uno dispone de todo el tiempo del mundo por delante.

Tiempo contra ilusión.

La necesidad de cualquier persona de poder sentirse vivo.
¿Vivir infinitamente es sinónimo de vivir la vida?.  ¿Es lo mismo "vivir" que "estar vivo"?

Tarjeta amarilla

Relato sobre la caída en desgracia de un adinerado cuando una revolución popular hace caer el gobierno imperante.

Miserias, hambre y lucha. 

El cambio de posición dentro de la pirámide social sirve para ver las dos caras de la sociedad, la del que está arriba y la del que está en la parte más mísera de todas, la del paria social invisible para casi todos sin opciones de salir adelante.

Uno de los personajes menos agradables de leer de todo el libro. Realmente despreciable pero una herramienta increíble para hablar del ser humano y de lo que le mueve... de la soberbia, de la suerte... o de la importancia que pequeñas decisiones pueden tener en nuestro futuro.

Suave

El más difícil de comentar porque parte de un asesinato de un hombre a una mujer en el momento en el que éste explota sin control ante una situación como muchas otras del día a día.

Un personaje deleznable, que no asume sus actos pero que sirve para ver todo lo que nos rodea hoy en día por el mero hecho de vivir en esta socidad, la presión que tenemos siempre encima, que nos aliena y nos impide disfrutar de lo que es estar vivo. Y lo que pasa cuando uno se sale de "esa sociedad".


La bomba número 6

La historia de la humanidad el día que deja de necesitar hacer cosas por si misma porque hay un sistema ya operativo de máquinas que funcionan en automático.

Lo que sucede cuando la gente se dedica a la autocomplacencia, a dejarse llevar, volviendo a sus orígenes y prescindiendo de cualquier otra actividad que requiera el más mínimo esfuerzo: pensar, comunicarse, aprender... 

Pequeñas ofrendas 

La más extraña de las lecturas, puede que por ser la más dura, posiblemente porque de todas las lecturas puede que plantee la situación que más me cuesta aceptar.

El sacrificio de una vida para intentar generar una nueva vida mas sana en un mundo en el que los contaminantes y cuanto nos rodea (aire, agua, etc...) produce cambios en nuestro organismo que acaban generando malformaciones y niños enfermos.