domingo, 23 de junio de 2013

The perks of being a wallflower - Las ventajas de ser un marginado

"The perks of being a wallflower" es la narración, en primera persona, de los sucesos que a lo largo de un año acontecen a Charlie y las personas que conforman su universo: sus padres, sus hermanos y sus dos mejores amigos, Sam y Patrick.

La novela está escrita como una sucesión de cartas que Charlie escribe a un amigo, de un amigo, de... al que no conoce pero del que ha oído que es una buena persona. Como si leyésemos su diario o su correspondencia con un amigo, acabamos sumergiéndonos en la cabeza de un adolescente "poco" funcional, en ese chico standar que hemos sido la gran mayoría de nosotros, que ni llegamos a estrella del equipo de fútbol ni los mayores genios de las aulas, ni los rebeldes peligrosos y molones.

Charlie es un joven solitario y marginal cuya historia comienza justo con el fallecimiento de un amigo y concluye poco después del cierre del siguiente ejercicio académico. Un periodo de tiempo en el que le vemos crecer, hacer nuevos amigos, evolucionar como persona (a través de diversas vivencias y de unas cuantas lecturas que un profesor le va dando para que realice trabajos), conocer el primer amor, salir con alguien por primera vez o soportar las distintas celebraciones familiares.

Sí Mark Haddon, en "El curioso incidente del perro a medianoche" nos mostró la realidad de un niño autista, Stephen Chbosky nos muestra aquí la de un joven a principios de los años 90, cuando quizá no se "desfasaba" tanto como ahora pero donde también había muchísimas cosas que podían llevar a un joven a perderse. Quizás el "Christopher" de Haddon es más llamativo para nuestro lado más voyeur (¿quién no quiere sentir/entender lo que pasa por la cabeza de un niño autista?) pero las vivencias de Charlie son mucho más próximas, ¿quién no ha tenido 15 años y se ha sentido perdido en algún momento?¿Y ese primer amor?¿y esa...?

Lo más curioso es que  da igual cuando pasases por allí, tus recuerdos y la forma en que crees que viviste las cosas, ya no son las de entonces y cuando lees las (des/a)venturas de Charlie no puedes dejar de sentir que estás leyendo la historia bajo el prisma de un crío y la estás entendido desde la visión mucho más "formada" de un adulto. 

Hay partes de la narración que el adolescente que las lea vivirá tal y como las viven los personajes pero que los "adultos" experimentarán con mucho más sentido y, por tanto, con una visión totalmente distinta de las circunstancias. Las omisiones y los silencios son rellenados, los idealismos infantiles son reemplazados por la amargura de la experiencia y los sucesos que Charlie no es capaz de procesar/valorar en su justa medida son juzgados con el rigor que da el paso de los años.

Charlie es un personaje con el que sonríes y por el que sientes una grandísima pena en función del momento de la obra en el que estés, porque no siempre entiende las cosas que pasan y es consicente de ello y/pero, sobre todo, porque muchas veces no es capaz de entender lo que está pasando dentro de él.

"The perks of..." es una novela realista que muestra un momento de la vida de varias personas donde los caminos empiezan a divergir y donde las equivocaciones y las consecuencias tienen mucho mas peso. Es una novela que habla de la inocencia y de su pérdida, en muchos sentidos y de muchas formas, un proceso por el que pasan casi todos los personajes de la novela.

Sin ser una novela violenta, sin narrar necesariamente nada especialmente truculento, las omisiones, los silencios y los "sobreentendidos" llenan hojas y hojas de la narración y en ellos se encuentra su "hermosura" y su dureza. 

No creo que sea una lectura para un chaval (iba a decir crío...) de 15 años. Creo que por lo menos debería dejarse para un momento  posterior, porque dejará muchas más preguntas que respuestas. ¿Y si lo leen acompañados por un adulto? a lo mejor sería una buena solución pero no creo que trate de temas que ningún adulto pueda tratar con comodidad. Al menos no los más escabrosos. 

Creo que es una gran novela para adultos que nos ayuda a aceptar que con los años hemos ido perdiendo la perspectiva de cómo se ven las cosas cuando uno no tiene cierto bagage. Una reflexión un tanto sombría sobre la vida y sobre como somos el resultado de nuestras vivencias y experiencias, de aquellas que nos han marcado, incluso las de aquellas a las que no llegamos a otorgar el peso que realmente han tenido en nuestro comportamiento.

Si tuviese un club del libro creo que sería uno de los que propondría como lectura obligatoria para así poder comentarlo y hablar sobre él. Hay muchísimas cosas que se pueden decir y sacar de esta obra que se lee muy bien, que por momentos nos retrotrae a nuestra adolescencia y que, finalmente, nos lleva a agradecer el haber podido dejar atrás aquellos momentos de dudas e incertidumbre, de incomprensión y soledad. ¿que como adulto también los hay? Sí, es cierto, pero normalmente tenemos herramientas a nuestra disposición para interpretar y valorar lo que pasa...y Charlie, no.

Un 8. Una lectura obligatoria que cuenta, además, con algo que a muchas otras les falta...¡¡¡MÚSICA!!! Y, si cuando termines la novela no has tenido bastante con las canciones que allí aparecen siempre puedes probar "It's time" de Imagine Dragons, que sirve de música de fondo al trailer de la película.

No hay comentarios: